3 de abril de 2008

Punto final

Bueno, pues ya está. Ya se acabó. Y me jode. Porque no quería. Porque te quería. Porque seguro que hubo solución. Pero ayer cuando hablamos y te planteé que no era capaz de levantarme por la mañana y no quitarme de la cabeza la situación, de pensar continuamente que tenía la sensación de que te reías de mí, que no sabía que es lo que esperabas de mí... por primera vez me contaste la verdad. Y eso bastó para dejarlo todo claro. Tú tomaste la decisión, no yo. Por que yo no puedo mantener una relación con alguien que me dice que no sabe qué hubiera pasado con esa persona en discordia si no te hubiese cortado las alas y te hubiera puesto freno. Porque yo SÍ lo sabría. En mi caso no hubiera pasado NADA. Yo no habría dado pie a que hubiera pasado esta situación porque yo creo (creía) que valías la pena y que lo nuestro podía funcionar. Y eso es una putada. Porque no puedo estar pendiente de que al siguiente que conozcas y te guste, te siga el rollo o prefiera pasar de ti porque tienes novio (yo). No soy capaz.
¿No crees que es injusto para mi? Yo si y por eso hablamos ayer. Porque no podía más. No pensaba en otra cosa. Y no supiste estar a la altura. Me preguntan que cómo me encuentro. La verdad es que no lo sé (tu frase favorita: "No sé"). Por un lado estoy tranquilo porque he sido coherente conmigo mismo y he sido capaz de afrontar la situación que me atormentaba. Por otro, he tenido que romper con el hombre de mi vida. Así que me encuentro triste.
Lo único que me queda es desearte suerte (suerte en la vida y en Mil·leni, que la vas a necesitar) y devolverte las llaves de tu casa. La verdad es que no sé que actitud habrás tomado respecto a mi pero supongo que ya me enteraré.

No hay comentarios: